Ayer martes Salma Hayek estuvo de compras por Hollywood oeste junto a su hija Valentina Paloma Pinault Hayek. Ambas estaban radiantes saliendo de la boutique de Balenciaga, donde fueron vistas.
Valentina, que iba en brazos de su “nanny”, va a cumplir seis meses y parece tener los hermosos ojos marrones de la actriz. Salma, por su parte, se encuentra súper feliz en su papel de madre y se encontraba muy sonriente y natural.
Hace unos pocos días saltó la polémica tras unas declaraciones del productor (y amigo intimo de la actriz) Felipe Fernández del Paso (nominado a un óscar por la película Frida protagonizada por la actriz) en las que aseguraba que Salma no quiere bautizar a su hija Valentina porque “no le da la gana”.
No sabemos hasta qué punto habrá influido en esta decisión el francés François-Henri Pinault, pareja de la actriz y padre de la niña, ya que Salma es de México y en su tierra hay profundas raíces católicas.
¿Qué pensaran los compatriotas de su Veracruz natal?