Muchos críticos del mundo de la moda nombran a Cara Delevingne como la sucesora de Kate Moss. Aunque yo no soy partidaria de llamarle a quien sea «la sucesora» de quien sea. Kate Moss siempre será Kate Moss y ya veremos si Delevingne llegue a ser alguien más allá de las pasarelas. Pero admito que algo verdadero hay en esa afirmación… Pero ese «algo» no está relacionado con su actividad profesional sino más bien con su vida personal.
Días atrás en los tabliodes aparecieron fotos de la modelo con un misterioso sobrecito con polvo blanco. El sobrecito fue avistado en el momento cuando Cara estaba buscando en el bolso las llaves de su casa en Londres. Así lo contó el autor de fotografía:
«Ella estaba intentando entrar en casa pero no paraba de repetir riéndose que no tiene llaves. La situación le parecía muy graciosa aunque a la amiga que la acompañaba no pensaba igual. Y de repente se ha caído algo de su bolso. Cara lo pisó con cuidado, luego rápidamente lo recogió y lo volvió a meter en el bolso»
A lo mejor la modelo pensó que nadie se habría dado cuenta, pero nada más lejos de la verdad. Ahora todos los medios no paran de hablar de que el sobre seguramente contenía la cocaína, la sustancia a la que durante un tiempo estaba aficionada Kate Moss.
En su momento el escándalo con la cocaína le costó a Moss varios contratos, entre ellos el de H&M, marca con la que ahora trabaja Cara Delevingne. Pero también es verdad que aquel escándalo sirvió a Kate Moss, que para entonces ya llevaba casi dos décadas en la industria, como trampolín para llevar su carrera a un nuevo nivel. Ahí fue cuando la modelo demostró que ella es auténtica leyenda de la moda. Mientras que se podría decir que la carrera de Cara Delevingne solo acaba de empezar, así que para ella las consecuencias podrían ser completamente diferentes.