El viernes pasado Sylvester Stallone, que acudía a la conferencia Comic-Con en San Diego, recibía una trágica noticia: su hijo mayor, Sage Stallone, moría repentinamente a la edad de 36 años. El cuerpo del joven fue encontrado por su asistenta en su casa de Los Angeles. Los vecinos llevaban una semana sin ver a Sage y se pusieron en contacto con su madre. Y ella a su vez pidió a la asistenta visitar la casa de Sage.
Según los datos policiales, el cadáver no había ningún signo de violencia ni tampoco signo de suicidio, por lo que su muerte está siendo investigada. Una de las hipótesis previas dice que la muerte podría ser causada por un fármaco utilizado con Sage ya que estas pastillas fueron encontrados a su lado, aunque su fabricante se ha apresurado en afirmar que es imposible. Además se sabe que Sage llevaba muerto ya 3 o 4 días.
El abogado del hijo de Stallone, George Braunstein, aclaró al conocer su muerte que «no estaba deprimido y estaba pensando en casarse»:
«Tenía toda su vida por delante y muchos proyectos. No tenemos aún ningún detalle.»
Además George Braunstein dijo que el actor está devastado tras conocer el fallecimiento de su hijo:
«Su compasión y sus pensamientos están con la madre de Sage, Sasha. Sage era un talentoso y maravilloso joven. Su pérdida se recordará por siempre»
Sage Stallone era el primer hijo de Sylvester Stallone y de la actriz Sasha Czack. Sage también se inclinó por el mundo de la interpretación e incluso había trabajado con su padre en la película «Rocky V». Pero en los últimos años se dedicaba a restaurar y distribuir de nuevo películas de serie B de los años 70 y 80.