Gwyneth Paltrow tiene dos hijos con el cantante de Coldplay Chris Martin, Apple de seis años y Moses, de cuatro. Y aunque el nacimiento de su hija fue un motivo de gran alegría que la actriz vivió intensamente, no ocurrió lo mismo con el pequeño. Paltrow no entendía sus sentimientos y se sentía «como un zombie«.
«Era terrible, era justo lo contrario a lo que pasó cuando Apple nació. Con ella, yo estaba en una nube. No podía creer que no fuera igual. No podía acceder a mis emociones. Pensé que eso significaba que era un horror como madre y como persona«, ha declarado la actriz en una entrevista.
El tiempo pasaba y Paltrow aún no era capaz de entender su situación. Estaba padeciendo una depresión posparto, que logró identificar gracias al apoyo de su marido. «Cuando llevaba cuatro meses así, Chris vino y me dijo: ‘Algo va mal’. Yo seguía diciendo ‘no, no, estoy bien’. Pero Chris lo identificó, y de alguna manera todo estalló«, continúa explicando.
Una vez que comprendió que tenía un problema, lo peor había pasado, aunque no supuso un paso sencillo. «Pensé que eso significaba estar todo el día llorando y ser incapaz de cuidar a mi hijo. Pero hay diferentes formas y profundidades, por lo que creo que es muy importante que las mujeres hablen de ello. Yo me sentía una fracasada», añade.
Ahora que lo ha superado y ha sido capaz de entender lo ocurrido, sabe que es muy importante estar atenta a los sentimientos para poder fortalecerse y afianzar su relación de pareja, aunque no sea algo fácil. Desgraciadamente la depresión posparto es algo que sufren muchas mujeres y que tiene solución.
Gwyneth es una linda y talentosa actriz y debe comprender que el problema que tuvo es común para muchar mujeres, así que lo que queda es afrontarlo de la mejor manera posible. Hace poco se la ha visto en la serie Glee y la verdad es que se ve estupenda.