Carla Bruni, irreconocible

Francia está en estado de shock. Y no solo es por los resultados de las elecciones sino también por el estado del rostro de la actual Primera Dama del país, Carla Bruni. Carla está irreconocible. La diferencia del actual aspecto de Bruni con el de hace un par de años es brutal. Algunos incluso creen que no es Carla Bruni verdadera, sino su doble y que la verdadera Bruni se ha hecho monja.

Fuera las bromas, decir que la cara de la ex modelo asusta es no decir nada. La aparición de Carla cuando fue a depositar su voto en compañía de su marido despertó una ola de críticas de su aspecto. La prensa francesa de momento guarda el silencio, pero la prensa británica muy entusiasmada de ha ensañado con Carla.

Así “Daily Mail” publicaba ayer dos fotografías de la Primera Dama francesa, la del domingo y la de hace cuatro años. La diferencia es abismal. En el articulo un reconocido cirujano plástico de Estados Unidos, Ben Benham dice que este resultado es la causa de su adicción a botox:

“Carla está excesivamente “botoxizada”. Se ha hecho demasiado. Por eso tiene esa cara de sorpresa y parece una ardilla. Seguramente ella usa Radiesse, que es un rellenador de arrugas. Los resultados no parecen naturales.”

Algunos en los medios incluso la comparan con Jocelyn Wildenstein, ejemplo de las desgracias en las que puede caer una simpática mujer al no saber moderar su afán por la “eterna juventud”. Y no les falta la razón. Carla cada día más se acerca a Jocelyn.

Y esto es Carla Bruni hace tan solo 3-4 años:

Y esto es Carla bruni en 1991.

Por supuesto que no se puede recuperar la juventud, pero eso lo tiene que entender la propia Carla Bruni.