Hace pocos días conocimos que la modelo británica disfrutó de unos días de descanso en Mallorca con su actual compañero, el cantante Jamie Hince. Este viernes fue noticia por perder su pelo a la salida de una fiesta.
Las vacaciones en Mallorca fueron pagadas por Sir Philip Green, el millonario propietario de ‘Topshop‘, cadena para la que trabaja la modelo. Al parecer se apiadó de ella cuando le llamó deprimida tras perder el contrato de ‘Agent Provocateur‘. La cuenta del viaje ascendió, según el tabloide ‘The Sun‘, a 125.000 euros (lo que no está nada mal).
Kate no levanta cabeza desde que se separó de Pete Doherty, su vida sentimental es un desastre y cada dos por tres pierde importantes contratos. Todo esto ha llevado a que el carácter de Kate se haya amargado, estropeado su físico y sufra constantes depresiones y estrés, lo que genera éstos altibajos en su carrera.
El último episodio de su culebrón particular tuvo lugar la noche del pasado jueves. Kate acudió a la fiesta organizada para presentar su nueva fragancia ‘Velvet Hour‘, que se celebraba en el ‘Wartergate Club’ de Berlin. Cuando abandonóa la fiesta, ya de madrugada y tras varias horas bailando, Kate perdió una de sus extensiones sobre la alfombra roja del club. Un avispado fotógrafo que se encontraba allí no dudó en recoger el valioso tesoro y comenzó a posar, como si de la propia modelo se tratase, con el mechón de pelo “postizo”. ¿Cuánto tardaremos a ver a la venta en eBay “el pelo de Kate Moss”?
1 comentario