Scout Willis, la hija de los actores Bruce Willis y Demi Moore, se apunta a la moda protesta enseñando sus pechos paseando por las calles de Nueva York, Estados Unidos. Según ella misma afirma: “Lo que discuto es el derecho de una mujer de escoger cómo representar su cuerpo; y hacer esa elección basada en deseo personal y no en temor de cómo reaccionarán las personas o cómo la juzgará la sociedad. A ninguna mujer se le debe hacer sentirse avergonzada de su cuerpo”. Este comentario va a colación de las constantes censuras que algunos usuarios famosos o no, sufren por las redes sociales, véase Instagram.
Los comentarios de la famosa pareja no se quedan ahí, en una búsqueda a mi juicio acertada del derecho individual de elegir hasta donde quieres o no quieres mostrar. No se pone en tela de juicio fotografías de mal gusto, violentas, grotescas que invaden el derecho a la intimidad o simplemente revelan la estupidez humana como algunas selfies, pero si el que una mujer decida hacerse una foto con una camiseta transparente. No hay cabida para estas censuras en una sociedad en la que lo menos escandaloso son los pechos de una mujer.
Y no porque la chica tenga 22 años y sea proveniente de una familia con pasta y medios, no se debe banalizar su protesta. Leyendo los comentarios razonados de Scout, me parece que su decisión es más fruto de un pensamiento razonado que de la niñería.