El equipo de seguridad se ocupa de la prensa y los fans mientras Mariah Carey posa a la entrada del Hotel GeorgesV en París. La cantante acudió allí el pasado domingo a promocionar ‘Touch My Body‘ el primer single de su próximo álbum E=MC².
Querida Mariah, no nos la pegas con eso de «toca mi cuerpo» tu actitud de diva es mas de «mírame y no me toques» que la de una artista consagrada (que es lo que deberías ser tras más de 17 años en la música). En el fondo siempre te has creído por encima de los mortales o al menos es lo que siempre pensé tras su matrimonio con Tommy Mottola, presidente de la discográfica que la daba de comer.
A partir de entonces dejo de cautivarme su tremenda voz. Nunca supe que hubo detrás de ese matrimonio, siempre pensé que solo buscaba poder y que Tommy solo fue una marioneta en sus manos. Utilizado al igual que Luis Miguel, el cantante fue pieza clave en una hábil estrategia de marketing para relanzar la carrera de la diva tras su estrepitoso fracaso como actriz y cantante en el2001con ‘Glitter‘.
La cantante nunca nos dejara de sorprender. No puedo ocultar que no es santo de mi devoción pero, he de reconocer, que da mucho juego. Ánimo Mariah que no decaiga, te seguiremos observando «sin tocarte»