Durante muchos años han sido una pareja ejemplar. Llevan 15 años juntos y tienen dos preciosos hijos, Jaden de 13 años y Willow de 11 años. Pocos en Hollywood podrían presumir de una historia de amor tan duradera e inquebrantable. Pero incluso en esta próspera familia feliz llegan malos tiempos. Porque parece que la imagen exterior de la unión de Will Smith y Jada Pinkett no es igual a la de puertas para dentro.
Según la revista ‘Star’, Jada y Will desde hace ya mucho tiempo llevan vidas separadas. Y la razón de ello son constantes conflictos de la pareja, especialmente por culpa de la afición de Will por las fiestas con sus amiguetes. Según afirma una fuente cercana a la pareja, los dos han estado fingiendo durante mucho tiempo y no quieren vivir en una mentira por más tiempo:
«Llevan viviendo y durmiendo por separado durante mucho tiempo sin atreverse a confesarlo, pero Jada ya no puede más y va a pedir el divorcio.»
Así es. Una de las familias más duraderas de Hollywood está a punto de romperse. Y lo único que parece les contiene a hacer éste último paso es el miedo que el divorcio podría perjudicar sus carreras. Pero la paciencia llega a su fin. Algunos de los supuestos «amigos» de la pareja no llaman este matrimonio de otro modo que «una gran mentira» e incluso llegan a afirmar que Will y Jada han tenido estos problemas desde siempre.