La guapa, y siempre problemática actriz, Lindsay Lohan, que está internada en la Clínica de Rehabilitación Betty Ford, de Los Angeles, por sus graves problemas de alcohol y drogas, temdrá que superar una nueva adicción: internet.
Según los médicos, la joven se pasa todo el día conectada a internet.
Es por ello que las autoridades del centro asistencial debieron limitarle el uso del teléfono móvil, así como reducirle el tiempo que pasa en internet conectada a las redes sociales.
«…Sólo le permiten usar su móvil dos horas al día y únicamente para mantener el contacto con su familia y sus amigos más allegados…», indicó el diario New York Post.
Los médicos del centro Betty Ford le impusieron las mencionadas normas por el bien de la actriz, según dijeron, para «que pueda concentrarse en ella misma» mientras dure la terapia de desontixcación.
Lindsay, quien en sus apenas 24 años de edad, ha estado ya en rehabilitación por abuso de sustancias, ha estado ya en prisión; ha pagado cientos de miles de dólares en fianzas para evitar la cárcel.
En el 2007, admitió ser adicta al alcohol y las drogas; desde entonces ha ingresado en tres ocasiones a centros de rehabilitación.
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