Esto que os voy a contar parece una historia de telenovela, pero lamentablemente no lo es.
Ella, la víctima y protagonista de esta historia, es una bella actriz y modelo venezolana de 36 años, famosa por sus roles de «malvada».
La mala de este cuento sería su asistente personal, que durante varios meses intentó envenenarla.
Cada día, le colocaba un poquito de sulfuro de amonio en las comidas y bebidas que Gabriela Spanic ingería.
Y así, durante cuatro meses.
Sin embargo, ningún guionista dejaría morir a su principal personaje.
Y eso mismo ha sucedido en este caso, gracias a las sospechas de la actriz, que al sufrir malestares decidió consultar al médico.
Éste le confirmó la sorpresiva y desagradable noticia de que en su sangre existía una elevada presencia de sulfuro de amonio, el que era utilizado como veneno.
Pero, y para peor, el envenenamiento no paró sólo en Gaby, pues toda su familia fue víctima de las perversas intenciones de la asistente.
La joven argentina, ya fue detenida y acusada de «intento de homicidio».
¡Increíble!, ¿no os parece?