La actual figura de la música adolescente protagonizó el pasado mes de febrero la portada de la revista «Vanity Fair» con unos números escandalosamente bajos. Sólo se pudo vender la mitad de las copias que en un mes cualquiera.
El principal problema vino de base, el público al que se dirige la revista no es ni mucho menos el mismo que idolatra al cantante, es decir, las niñas de 12 a 14 años compran mucho antes la «Bravo» que la revista en cuestión; más que nada porque prefieren un póster central que una portada que no pueden ni recortar por estar llena de titulares.
Si a todo lo anterior se le suma el hecho de que la portada era desafortunadamente poco acertada, Justin Bieber remató la revista con algunas frases lapidarias, entre las que se destacan: «Estoy muy loco, pero supongo que los mejores artistas lo están» y «Si una chica me viera caminando por la calle, se daría la vuelta para mirarme, porque soy atractivo».
«Vanity Fair» está intentando remontar las ventas para cerrar el semestre con resultados aceptables, pero este número en concreto podría quedarse en el pódium de sus ediciones menos vendidas de los últimos 12 años.