La boda celebrado en Letonia, como ya anunciaba el cantante en su momento, con carácter secreto e íntimo que tuvo lugar en la casa familiar de los padres de la novia. Los novios fueron sorprendidos con diversas costumbres y tradiciones típicas de las bodas letonas, en los que Carlos demostró incluso su buena forma física.
La novia, arquitecta y millonaria, lucía un diseño exclusivo de Manuel Mota para Pronovias en “chiffon” de seda con minifalda semiabullonada, cuerpo drapeado y un cinturón-joya de cristales de Swarovski en forma de estrellas. “¿Se puede estar más hermosa? Es una mujer muy guapa, pero hoy está impresionante, parece una princesa”, declaraba Carlos Baute. “Me siento un hombre completo, supercasado, y adoro estos anillos. La alianza va a ser ahora mi talismán”, afirmaba el cantante tras dar el sí quiero, desde luego Baute sigue tan emplagoso como siempre.
“Sabía a lo que iba y estaba seguro. Yo no soy de llorar, pero me he emocionado muchísimo cuando he entrado por la puerta y he visto a nuestras familias esperándonos. Ha sido algo mágico”, explicaba el venezolano”. La boda religiosa se celebrará el 16 de junio del próximo año en Mallorca y tendrá un número de invitados mucho mayor porque Astrid tiene familia repartida por el mundo, incluso en Australia y los amigos de Carlos Baute acudirán desde México a Argentina y Estados Unidos.