El viernes en Sálvame Diario, Paz Padilla le adelantaba a Karmele Marchante las imágenes de un cámara oculta que se iba a emitir en Sálvame Deluxe esa noche. Un reportaje que vení como consecuencia de la participación de la colaboradora en La Caja Deluxe. Las palabras de la periodista sobre su vida trajeron consigo numerosas llamadas desde su ciudad natal Tortosa en Tarragona para desmentir algunas de las cosas que había dicho Karmele.
Cuando la colaboradora vio como decían que mentía que ella no había cuidado a su madre, sino su prima Finita; que no había sido nombrada hija predilecta de Tortosa, que su abuela no tenía dinero y que aunque no recibió el cariño de sus padres, si el de toda su familia, se sentía humillada y salía descompuesta del plató y no se la volvía a ver ni escuchar hasta el momento.
Antes de marcharse a su casa, se reunía con Carlota Corredera, directora de la edición Deluxe y después se marchaba a su casa y ya no contestaba a las insistentes llamadas del programa. Antes le podíamos escuchar matizando que ella pagaba a su prima y a una enfermera para que cuidaran a su madre y que cuando no trabajaba los fines de semana, se iba a Tortosa para estar con ella.
Asimismo desde Sálvame, llamaban al Ayuntamiento de Tortosa donde confirmaban que Karmele no ha recibido ningún reconocimiento por parte del consistorio. En El programa de Ana Rosa, Belén Rodríguez, Alessandro Lecquio y Maxim Huerta apoyaban a la periodista y decían que a cualquiera le podían encontrar miserias y que no era de recibo sacarlo en pantalla, mientras que Ana Rosa decía muy acertadamente que Sálvame es un reality donde los colaboradores son los concursantes y que se exponen a eso, por lo que si alguno les molesta que dejen el programa. Esta tarde veremos qué sucede con Karmele Marchante.